Mis disculpas Don Pablo…
Hace algunos años atrás se acercó una tarde hasta la radio y me pidió aclarar esta polémica que se generó en torno a su “status” de último habitante de Epecuén. Ese día me dejó bien en claro su pertenencia, su historia y dimos por finalizado el asunto. Hoy, basándome en su indiscutible y permanente presencia, amabilidad y disposición, me parece que Don Pablo, no merece en absoluto continuar siendo cuestionado. Nunca tuvo interés alguno, más que el de ser un paisano amable y dispuesto para cuánto curioso se acercara, con esa bonhomia compuso un personaje que resulta indiscutible y diría [Leer más]