Los cuatro cementerios de Carhué

Por el Licenciado Gastón Partarrieu Director del Museo Regional Adolfo Alsina

Los cementerios son el ámbito que alberga la memoria de los que ya no están. Las ciudades de los muertos aparecen como réplicas de las residencias de los vivos. Arquitectura monumental para las familias que pueden pagarla, reafirmación del status y de la identidad en las bóvedas familiares y en los panteones de las colectividades. Sepulturas en tierra y más tarde nichos para los menos pudientes.
Debido a las vicisitudes de la historia de Carhué, en el lapso de 110 años fueron cuatro los emplazamientos que las autoridades de turno debieron destinar para enterrar a los muertos de nuestra comunidad.

PRIMER CEMENTERIO (1876-1884)
Durante 1981, cuando la manzana nº 184 estaba ocupada por el Corralón Municipal, durante tareas de zanjeo para colocar tanques cisternas se hallaron restos humanos que habrían estado en rústicos féretros. Se hallaron restos de botas, cinturones y botones de chaquetas militares. Informado el Museo, se solicitó la colaboración de arqueólogos del Museo de La Plata quienes realizaron tareas de rescate y analizaron el material recuperado. En sus conclusiones proponen que “durante esta primera etapa de la ocupación…desde abril de 1876, hasta los primeros meses de 1877, debióse destinar un sitio en las cercanías del Fuerte, para cementerio. Aunque sobre él no da noticias el jefe de la Expedición, sabemos que registráronse muertos,…, es procedente inferir que aquellos fueron sepultados en algún lugar próximo al campamento, y que bien podría haber sido el lugar en donde se produjo el hallazgo que nos ocupa, el primer cementerio militar.”. Este cementerio debió seguir usándose hasta la habilitación del segundo en 1884. Es de suponer que en el lugar quedaron muchos cuerpos más que los siete analizados en La Plata, y no sólo de militares.
En el año 1984 se promulgó una ordenanza municipal que creaba en el dicho predio la “Plaza del Soldado Desconocido de las Campañas al Desierto”; y en 1991 existió un proyecto de ley para erigir un monumento. Dicha manzana es hoy ocupada por el Jardín 901, la Casa del Niño y la Casa de la Cultura.

SEGUNDO CEMENTERIO (1884-1897)
En 1883 se realiza la nueva traza del pueblo Adolfo Alsina (hoy Carhué). Se destina para cementerio a la manzana Nro. 3 de la Sección D, distante a más de once cuadras de la actual plaza central, en dirección norte. Esta necrópolis fue probablemente utilizada hasta el año 1897, dado que por ordenanza municipal del 22 de diciembre de ese año se dispuso el traslado de los restos depositados en él a un nuevo cementerio. Sin embargo, casi dos años después, el 22-101899, el entonces intendente Pedro S. Gallo, ordenó exhumar todos los restos que no habían sido retirados y trasladarlos al Osario General del nuevo espacio. En la actualidad ese lugar (Quinta Nro 98) corresponde al Balneario La Isla, terrenos que serán parte del complejo Hidrotermal.

TERCER CEMENTERIO (1897-1986)
El cementerio habilitado en 1897 se ubicaba a más de veinte cuadras de la Plaza, en terrenos donde desemboca el Aº Pigüé en la laguna Epecuén. Respondía a las características que hoy aún pueden apreciarse en los cementerios de la mayoría de los pueblos de la zona. Representaban una ciudad, pero para los muertos: edificios importantes, barrios más modestos, calles y bulevares, forestación, etc.
Se accedía por un gran portón a un bulevar que permitía el ingreso de los carruajes de las pompas fúnebres. A los lados de este bulevar las familias adineradas erigían suntuosos mausoleos con subsuelos, especies de moradas para que la familia estuviera reunida en la eternidad. Los menos pudientes depositaban los cuerpos de sus muertos en nichos en la periferia o los sepultaban en tierra. Los niños tenían su sector.
Así, durante casi noventa años esta necrópolis fue acogiendo a los difuntos de la localidad, los que se estima habían llegado a unos siete mil cuerpos hasta 1985.
Entre 1978 y 1985 la laguna Epecuen creció notoriamente, al punto que inundó al pueblo homónimo. El cementerio no escapó a esa crisis. En su libro sobre la tragedia de Epecuen, Roberto Laspiur nos relata de manera cruda y por momentos surrealista como se vivieron esos instantes. El 10 de noviembre de 1985 la defensa de tierra y piedras de Epecuén había sucumbido y el agua había ingresado al pueblo, debiéndose evacuar en su totalidad. “Para el 17 de noviembre ya se discutía si las aguas del lago, que crecían día a día, llegarían hasta el cementerio. Un comunicado de la Comisión de Defensa Civil informaba que se estaban reforzando las defensas del cementerio pero que, no obstante, los familiares podían retirar a sus muertos tan pronto como se reparara el camino de acceso.”
Aunque los vecinos e instituciones que conformaban las Fuerzas Vivas, algunos ingenieros, vaticinaban que el cementerio quedaría totalmente bajo varios metros de agua, Laspiur cuenta del descreimiento de los pobladores de Carhué “No podíamos comprender cómo la marca, que habían pintado los ingenieros un metro más arriba de los portones de entrada al cementerio, podría cubrirse con el agua. Parecía imposible”
Pese a las advertencias recién se autorizó a retirar los cuerpos en diciembre de ese año. Las familias con los ataúdes de sus deudos cruzaban el pueblo en todo tipo de vehículos –camiones, camionetas, carros-, y eran depositados en galpones, campos, camiones o inclusive en casas hasta encontrarles lugar en algún cementerio de la zona. Esta no era tarea fácil, ya que las necrópolis de los pueblos vecinos como Puán y Pigüé estaban colapsadas por los muertos de Carhué.
La laguna continuó creciendo. Hacia julio de 1986 fue contratada una barcaza con seis buzos que durante seis meses se ocuparon de romper nichos y bóvedas debajo del agua para retirar los cuerpos para llevarlos al nuevo cementerio. La tarea finalizó en diciembre de 1986, con el trasladado 2391 féretros.

CUARTO CEMENTERIO (1986-actualidad)
Nuestro actual cementerio dista mucho de los tradicionales que se pueden ver en los pueblos vecinos, siendo más un Jardín de Paz. Los fallecidos se depositan únicamente en nichos o sepulturas.
Nació en la emergencia mientras se evacuaba el anterior. En diciembre de 1985 las Direcciones de Planeamiento Municipal y Provincial determinaron su emplazamiento a 9k de la plaza ppal.: un predio de 200 metros de frente por 300 de fondo ubicado en el vértice norte de la Chacra del Ministerio de Asuntos Agrarios que cedió el espacio. Durante el año 1986 comenzaron las tareas para construir nichos mientras las primeras inhumaciones se efectuaban en tierra. Los cuerpos rescatados por los buzos en 1986 fueron depositados en tierra e incluso hay una gran cantidad de NN. Veinte años después, entre 2008 y 2009 durante las limpiezas llevadas a cabo en el viejo cementerio, ya fuera del agua, decenas de bolsas con restos humanos productos de problemas en la evacuación, finalmente fueron llevados al nuevo osario para que puedan descansar en paz.

8 comentarios

  1. quisiera saber si puedo averiguar en que cementerio esta enterrado mi bisabuelo españolT llamado ANTONIO ANTONIO , su nombre y apellido eran iguales, tengo una carta de el que le envio a us esposa y a su hija para que viniera de España en el año 1924 donde dice que estaba radicado en Carhue y yo se que fallecio en carhue , me interesa saber mas datos . Su esposa era Maria Gonzalez Gonzalez

  2. Buenas tardes Gastón, sabés si existe un archivo de las personas sepultadas? Estoy buscando info de mi bisabuela María Dartayet (francesa) el censo de 1895 la ubica en Carhué y de mi bisabuelo Miguel Felipe de Alemán.
    Muchas gracias! Cualquier dato me sirve.

  3. Alguie sabe si existe una lista de nn en el sementerio nuevo? Mis abuelos estaban en el sementerio inundado y quiero saber donde estan ahora.

  4. De allí eran mis abuelos, al menos hasta la crisis de 1930, en que partieron para Buenos Aires. Eran Luis María Vega y Josefa Ferrero de Vega, con sus 5 hijos , Olga, Nica, Amanda, Ofelia y Luisito.
    Nadie sabe donde dejará sus huesos…y que se hará con ellos más tarde o mas temprano. Pero vivieron felices sus largas vidas.

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