Por Marta Oriani – Operador en Psicología Social
No mirar debajo de las alfombras o en los rincones, puede que nos deje un día perplejos ante una noticia que quiebra la rutina un poco preparada para no sufrir, un poco prefabricada como sueño o deseo de ser felices, se hace real ese día la verdad que no aprendimos a ver, que no queremos ver. Mecanismos de defensa que creamos, terraplenes que levantamos para contener lo que suponemos es la tranquilidad, o la paz, o el estado de confort , se desmoronan un día como una torre de papel con el viento, como castillitos de arena al chocar con la marea que naturalmente crece con la aparición de la luna, y la realidad se hace presente y nos encuentra frente a tener que afrontar, luchar, decidir, cambiar. Pero ,con el dolor del duelo, con el dolor de haber perdido los referentes que nos sostenían fuertes y seguros, apegados al engaño que nos proporcionamos a nosotros mismos por no revisar debajo de los muebles, porque cuando aparecieron los llamados de atención, atendimos la urgencia y dejamos de lado atender la necesidad. Los cambios duelen, los cambios impuestos mas todavía, nos sentimos esclavos de los que nos mandan cambiar, pero… si veníamos bien, habíamos podido comprar el cero kilometro, el crédito para la casa fue inminente, se dio la posibilidad, el viaje al exterior una y dos y tres veces, la oportunidad que tantos habíamos esperado por pertenecer a un rango social y económico un poco más elevado durante tanto tiempo, porque no yo ahora??? porque no??? porque no aprovechar si ahora somos todos iguales, tengamos o no los recursos para afrontarlo, tenemos la oportunidad y la vamos a tomar, porque tenemos lideres que nos guían a la gloria. Y después que? derechos, mas derechos, más derechos que nos merecemos, porque vivimos en uno de los países más ricos del mundo!!!!!!????
Y allí, ideológicamente, comienza a aparecer la grieta, esa grieta que se profundiza por la diferente manera de pensar y de actuar, la terrible separación que mata la amistad entre las personas que no pensamos igual , la inefable manera que nos separa, que crea enemigos , que nos enfrenta , que nos enferma , que nos lastima…….y que destruye, porque es FALTA DE TOLERANCIA , hay que identificarla y no subestimarla!!
Porque no encontrar la explicación, porque no buscar respuestas, porque no conducirnos de manera correcta para no hacer mal a los demás pero tampoco a nosotros mismos???? Pensemos en cambiar , entremos en conciencia que no somos tan importantes de creer que sabemos TODO, siempre hay que aprender algo mas, nadie tiene la verdad con mayúsculas, nadie tiene toda la razón, somos seres humanos e imperfectos, falibles, y muchas veces poco creíbles a nosotros mismos, renunciemos de una vez a esa manera facilista de encontrar el error en el otro, el error convive en nosotros, y nosotros no somos más que los propios artífices de nuestro destino, ya lo decían los antiguos griegos, todo en la vida es causa efecto, excepcionalmente interviene el azar
Que la luz que cada uno elige como su guía espiritual se encienda y nos deje crecer , madurar emocionalmente y cambiar . El dolor no es malo si dejamos que nos enseñe, capitalicemos cada experiencia dolorosa como superadora , el resto del camino será más liviano si podemos realizar los cambios estructurales
Marta Oriani
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