Las necesidades de algunos no siempre van de la mano de la realidad de otros.
Por estos días se observa, con algún grado de indignación, a decenas de políticos, (oficialistas y opositores), desfilar por los medios de comunicación enancados en la crisis aprovechando el espacio que los medios, (oficialistas y opositores), les dan para hablar y hablar, especular y embarrar el panorama que de por sí es bastante aterrador para nosotros los ciudadanos comunes y corrientes.
Aparecen especialistas en economía, artistas, profesionales, supuestos representantes de diferentes organizaciones y se suman dirigentes en actividad junto a otros retirados involuntariamente del erario público por el voto, todos llenos de ideas y soluciones retóricas.
Se suman los periodistas (oficialistas y opositores), que le ponen el valor agregado de sus tendenciosas actitudes para sumar tenebrosidad a los pronósticos, como si se estuviera librando una batalla en la que ya tiene el triunfo asegurado la tragedia…
Increíblemente en este maravilloso país que nos ha brindado siempre todo, algunos individuos,(individualistas), se esfuerzan con fluida creatividad para lograr que todo se desmadre y la sociedad se vea envuelta en una nueva caída brutal y desgarradora.
Por supuesto se multiplican, (oficialistas y opositores), por miles y quizá millones en las redes sociales, la grieta se impone poderosa, ignorante y soberbia por sobre todos los proyectos de vida que nos mueven a los 45 millones de Argentinos comunes y corrientes.
Son pocos, no son todos… pero, (oficialistas y opositores), se ofenden, se lastiman, se amenazan, muestran su peor decadencia, logran establecer el odio como único modo de razonamiento.
Mientras tanto los Argentinos comunes y corrientes seguimos intentando sobrevivir, trabajando diariamente, enviando a nuestros hijos a educarse, ajustando nuestros cinturones, recibiendo con resignación una vez más el bofetazo de los impuestos, de las naftas, de los privilegios que sólo disfrutan los que viven de la teta del Estado.
Nosotros, los ciudadanos comunes y corrientes, una vez más seremos los que sacaremos adelante a nuestra amada Argentina.
De eso no me cabe duda, será nuestra la responsabilidad y el sacrificio… los otros (oficialistas y opositores), seguirán destruyendo, seguirán odiando, seguirán intentando hundir a la Argentina con su egoísmo y oportunismo.
Para nosotros es hora de ayudar a la paz interna, de abrir nuestros corazones solidarios, de estar atentos para ayudar a reconstruir nuestra sociedad, no debemos permitir que gane ninguno de los dos bandos… tenemos la herramienta para hacer prevalecer nuestro sentido común, nuestra pacífica convivencia y el promisorio futuro que está frente nuestro…
Esa herramienta es el profundo amor que tenemos por nuestra Bendita Patria. Luchemos por ignorar la grieta miserable y dañina… ignoremos el odio y multipliquemos el amor, en nuestras familias, vecinos y amigos… Somos Argentina, nosotros podemos.
DOMINGO SAN ROMAN
Estoy totalmente de acuerdo con su opinión; pero creo también que siempre es bueno mirar atrás y reconocer cuando nos equivocamos. LOS QUE HOY NOS GOBIERNAN ESTAN AHÍ PORQUE LOS PROPIOS ARGENTINOS LOS PUSIMOS AL VOTARLOS.