Cambiar es terminar con las mentiras…

En tiempos del gobierno de Cristina Fernández, grupos de defensa al consumidor presentaron recursos de amparo contra los aumentos siderales de Gas y Electricidad. Así la justicia acompañó el reclamo de la gente y se llegó a suspender la facturación y proceder a emitir nuevas facturas. La población no podía pagar semejantes aumentos de los servicios esenciales para la vida cotidiana. Enojada la Sra. mandó imprimir una leyenda humillante para los que reclamamos justicia y equidad: “Consumo con subsidio del estado nacional” en grandes letras rojas, como si el Estado fuera de ella, ofendiendo a todos los ciudadanos y desconociendo que el Estado somos todos nosotros y que su sueldo y los vueltos, (que se sospecha se quedó), se los pagamos NOSOTROS LOS CIUDADANOS.

El actual Presidente Mauricio Macri increpó, en una charla debate, al entonces candidato del PJ Daniel Sioli, asegurando que su futuro gobierno no implementaría ningún tarifazo. Mintió.

La imposibilidad o incapacidad de gestionar el desastre económico que le dejó el gobierno de Cristina Fernández al del ingeniero Mauricio Macri, nos arrastró a todos a este estado de situación que cada día se torna más angustiante para la vida diaria de todos los argentinos.

Los técnicos de esta gestión de gobierno parecen no haber comprendido que no hay futuro si a la población se la castiga sin ningún tipo de compasión, haciendo casi imposible la subsistencia cotidiana.

No debe haber nada más agobiante para un padre o madre de familia, que el ingreso se diluya a causa del alto costo de los elementos imprescindibles para la vida diaria de su familia.

¿Cómo hace la gente común, obreros, trabajadores, jubilados, discapacitados, etc. para sobrevivir sin gas, sin energía eléctrica, sin agua, o sin comida?.

El Estado tiene responsabilidades sobre todos nosotros, pues es quien administra y ejecuta un mandato que le otorgamos a través de las urnas, pero ese poder no los habilita a destruir la vida cotidiana tal como está establecida, pues no hay objetivo superior para un empleado  político, que el bienestar de la población.

Los técnicos, los especialistas y los politólogos no son los dueños de la vida de los ciudadanos, son empleados que pasarán tristemente recordados, si por sus decisiones y medidas lastiman a cualquier habitante de la Nación.

En el actual rumbo el camino tiene un final anunciado y no va a ser feliz. La ex presidenta (co-responsable de este desastre), pontifica por estos días sobre el final apocalíptico, que según ella se acerca para este gobierno, dejando en evidencia una irresponsable y miserable actitud,  pues aviva desde su tribuna partidaria el fuego que ella misma dejó encendido a partir de su administración política y económica que tuvo, como lo estamos viendo y leyendo, un objetivo recaudador sistemático para enriquecerse junto a sus seguidores más cercanos… “porque había que hacer política”.

Pues ahora está llegando un desafío nuevo para nuestro país, desactivar de una vez y para siempre la impunidad, el robo, la mentira y la ineficiencia de una clase dirigente que ha traicionado al pueblo disfrutando de prebendas, honores y dineros que nos les corresponden.

La actual administración continúo jugando a la demagogia y colisionó contra un mundo que está harto de los dirigentes argentinos y sus irresponsabilidades… y hasta hoy, sólo ha demostrado que una vez más el camino que encuentra para solucionar el desastre económico y moral, es exprimiendo a los ciudadanos de bien que trabajan y se esfuerzan por salir adelante cada día en nuestro País.

Ya ha sido suficiente. Es hora de exigir respuestas y un verdadero esfuerzo por parte de una clase dirigente política, judicial y empresarial  convencida de que administrar un país es servirse de los bienes que aportamos los ciudadanos a través de nuestro trabajo y nuestros impuestos.

DOMINGO SAN ROMAN

 

 

3 comentarios

  1. Lo que más me sorprende es que a pesar de haberse afanado tanto, todavía quedara tanto más como para que los sueldos fueran mejores que los de ahora, las universidades funcionaran normalmente, se promoviera el desarrollo científico y se bajara el nivel de endeudamiento del país, se pudieran pagar los servicios sin endeudarse y los que somos de clase media nos pudieramos tomar vacaciones.
    Lo que sí les debo reconocer es que eran mucho más hábiles delicuentes que los delincuentes que nos gobiernan ahora ya que resulta muy difíciles encontrarles los miles de millones de dólares que se afanaron porque no lo hemos podido encontrar aún en cuentas en el extranjero ni en ninguna offshore como los que nos gobiernan que no saben esconder lo que se llevaron (Ver panamá papers y otros descubrimientos).
    Por lo menos nos queda el consuelo de que no van a poder o no saben como disfrutar de esa guita ya que siguen viviendo en las mismas casas que vivían antes y con el mismo nivel de vida.
    ¡¡¡MALDITA YEGUA Y SECUACES!!! Al menos aprendan de Lilita que vacaciona en Miami 3 o 4 veces al año

  2. totalmente de acuerdo con vos Doni Una persona y secuaces se robo hasta el agua de los floreros como vulgarmente se dice y la otra persona esta haciendo lo imposible para destruir la economía de los Argentinos y llevando la inflaciòn a niveles altos .subiendo combustibles y servicios creo no es la mejor forma de bajarla. falta poco para las proximas elecciones a quien votar a dos ya borre de la lista

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