Cuando Sergio Massa vuelva este domingo a la Argentina, dará inicio a una vertiginosa etapa que definirá varias cuestiones en materia económica y política. La discusión con el Fondo Monetario Internacional, el resultado de la gira por China, las decisiones electorales y la inflación serán algunos de los temas que recalentarán la agenda de junio.
Después de pasar por el gigante asiático acompañado por Máximo Kirchner en un intento por enviar señales de sintonía política, el titular del Palacio de Hacienda regresará al país con varios frentes urgentes abiertos–
En primer lugar, aun resta saber si se concretará un acuerdo con China para ampliar el swap, que hoy cuenta con US$5000 millones de libre disponibilidad y para el que el Gobierno tiene como objetivo duplicar el monto en el coro plazo.
Además, continúa la negociación para que el banco de los BRICS, que en primera instancia tenía previsto encontrar un mecanismo de financiación para las exportaciones brasileñas que permita evitar el uso de las reservas del Banco Central (BCRA), pero esa alternativa “no fue posible”, según expresó el mandatario brasileño Lula da Silva.
Según informó el Ministerio de Economía, el equipo que encabeza Massa se reuné este jueves con Dilma Rousseff, presidenta del Banco de los BRICS, para debatir alguna otra forma de conseguir algún tipo de salvataje financiero.
A la vuelta de China, el jefe de Hacienda espera sellar un entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que destrabe el adelanto de los desembolsos previstos para el resto del año. Además, el Gobierno negocia revisar la letra chica del acuerdo después de que las metas principales –acumulación de reservas, adelantos transitorios y déficit fiscal-, quedaron incumplidas en el primer trimestre y en parte del segundo. Uno de los mayores puntos de discusión con el organismo a estas horas es la posibilidad de tener un mayor margen de maniobra para intervenir en el mercado, contener la suba de los dólares paralelos y así evitar una devaluación brusca. El Palacio de Hacienda apunta a cerrar el nuevo pacto con el FMI para el 12 de junio.
A la situación se suman los compromisos con el Fondo Monetario: el Gobierno debe afrontar dos vencimientos el 21 y 22 de junio por US$2682,1 millones.
Por otra parte, para el 20 de junio, el Gobierno prometió poner en funcionamiento el gasoducto Néstor Kirchner, que tiene como finalidad principal generar un ahorro de divisas destinadas al pago de importaciones de gas, que -según las estimaciones oficiales- representarían unos US$2000 millones al cierre de este año.
El objetivo final de todas estas negociaciones es sumar dólares, pero las fuentes para revertir la escasez aún no están aseguradas. En mayo, las reservas cerraron en US$33.013 millones y marcaron un retroceso de casi US$2000 millones.
Como explicó TN, pese a que el dólar soja aportó US$5086 millones, el BCRA solo pudo retener el 25% del total. Es que la entidad monetaria comenzó a intervenir en el mercado desde la escalada del dólar blue y los financieros de abril, sumado a los compromisos vinculados a importaciones y el pago a distintos organismos.
“Es un mes que va a estar marcado por lo político y lo económico. Desde lo económico, es necesario seguir consiguiendo dólares para sostener la actividad en un contexto en el que el Gobierno sigue interviniendo, sumado a ver qué pasa con el Fondo y hay que ver qué pasa ahora que se termina el dólar soja si se pierden más reservas, que no sería bueno ni positivo”, resumió Sebastián Manescaldi, economista de EcoGo.
Elecciones e inflación
En ese escenario, el factor electoral empezará a sumar más calor a la agenda. El 10 de junio se desarrollará en Mar del Plata el congreso del Frente Renovador, en el que se espera que el ministro de Economía deje asentada su postura de cara a las próximas elecciones. Massa insiste en que el FDT tiene que presentarse a los comicios con un candidato único y no dirimir las diferencias internas a través de unas PASO.
En tanto, el 14 de junio será la última jornada disponible para inscribir las alianzas electorales, cuyos nombres deben quedar oficializados a más tardar el 24 de junio. “Desde lo político lo principal va a ser la definición de las listas, en particular qué pasa con el oficialismo y si Massa es candidato o no. Y si no es candidato, qué va a pasar con él”, planteó Manescaldi.
Ese mismo miércoles 14, el INDEC dará conocer el índice de inflación de mayo. Después del récord del 8,4% de abril, distintos analistas privados proyectan que la suba de precios será mayor a esa cifra y que incluso podría superar el 9%.
A modo de ejemplo, en la consultora C&T estimaron que la inflación del quinto mes del año rondará el 8,7%, impulsada por las alzas en los servicios de vivienda, como las tarifas de gas y electricidad.
Lo cierto es que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que releva el INDEC se fue acelerando mes a mes desde que empezó el año y lejos quedó el objetivo planteado por Massa de llegar a abril con “un 3 adelante”. La mayor preocupación por estos días es que la inflación mensual no marca dos dígitos ni este mes ni en los próximos.
Fuente: TN
Deja el primer comentario