La violencia es menor en el mundo en relación al siglo pasado que vió a la humanidad envuelta en dos guerras mundiales que se llevaron la vida de varias decenas de millones de almas y dejaron una destrucción hoy inimaginable de la civilización y los avances del hombre.
Sin embargo la nueva modalidad de violencia terrorista implementada por grupos mesiánicos y desaforados cargados de un odio racial, religioso y moral que sólo es comparable al existente en el medioveo, nos paraliza a y aterroriza.
Los lobos solitarios se convierten en armas imposibles de detectar, la tecnología de la guerra, que tantos miles de millones dólares mueve año tras año, no sirve absolutamente para nada contra un demente convencido de su “divina tarea” de asesinar infieles.
Esto basicamente es producto de la inequidad.
La soberbia mirada de las sociedades poderosas, (como las de EEUU y Europa), que estuvieron hasta ahora convencidos de ser invencibles y ni siquiera se tomaron la molestia de saber cómo sobreviven las comunidades de países o regiones a las que han sometido a escarnios, les han robado su única riqueza, los han dejado sumidos en dictaduras asesinas y hambrunas desgarradoras.
Hoy la muerte absurda de cinco compatriotas que recreaban un momento de sus vidas sin imaginar siquiera que sería el fin de sus días, nos produce una devastadora sensación de dolor absurdo.
Murieron a manos de un joven Uzbeko. Ni siquiera podemos señalar con certeza en un mapa dónde queda ese país, ¿o es sólo una región? ¿ o no es nada? Creo que nunca lo terminaremos de saber.
La violencia es el último recurso de los incompetentes, reza un dicho que siempre me ha parecido muy acertado.
Este creo que es el punto… mientras las sociedades poderosas no comprendan que de la violencia sólo se sale con equidad, bienestar mutuo y mucha, pero mucha educación… este planeta nuestro seguirá siendo caldo de cultivo para la irracionalidad.
DOMINGO SAN ROMAN
Nota: La República de Uzbekistán, anteriormente llamada Gran Bukaria, es un país situado en Asia Central. Limita al noroeste y al norte con Kazajistán, al sur con Afganistán, al noreste con Kirguistán, al sureste con Tayikistán y al suroeste con Turkmenistán. Junto con Liechtenstein, es uno de los dos únicos países doblemente aislados del mar, es decir, que uno desde Uzbekistán tiene que atravesar dos fronteras mínimamente para llegar al mar (salvo que se consideren como mares —y no como lagos— el Caspio y el casi desaparecido mar de Aral).
Fue parte integrante del Imperio samánida hasta que pasó a la dinastía Timúrida. La región fue conquistada en el siglo XVI por los nómadas uzbekos, que hablaban un dialecto del turco oriental. La mayor parte de la población uzbeka sigue hablando el uzbeco, idioma de la familia de las lenguas túrquicas.
Uzbekistán fue incorporada al Imperio ruso en el siglo XIX y en 1924 se constituyó en República Soviética, en el seno de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas conocida como la República Socialista Soviética Uzbeka. Accedió finalmente a su independencia en diciembre de 1991 después de la desmembración de la URSS.
La economía de Uzbekistán reside en la producción de diversas materias primas, como algodón, oro, uranio, potasio y gas natural. A pesar de declarar su intención de convertirse en una economía de libre mercado, hoy por hoy, sigue manteniendo rígidos controles, que a veces ahuyentan a los inversores extranjeros. La política de transición gradual, estrictamente controlada ha producido sin embargo resultados en la forma de progreso económico después de 1995. La política interna de Uzbekistán sobre derechos humanos y libertades individuales es a menudo criticada por organizaciones internacionales.
Fuente:www.wikipedia.com
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