Los principales candidatos a gobernar la provincia desde diciembre encaran la recta final hacia octubre. En Buenos Aires no hay balotaje y se juegan a todo o nada.
A partir de esa semana, vuelve la campaña electoral a la Provincia. María Eugenia Vidal, que es la más urgida, que debe remontar casi un 20%, es la que activará primero: mañana martes o el miércoles anunciaría paquete de medidas que buscarán incentivar el consumo y darle beneficios a los sectores más castigados por la crisis económica.
Si bien Vidal actuará en espejo a Mauricio Macri, tratará de despegarse de la figura del Presidente y buscar que los bonaerenses identifiquen puntualmente su gestión.
No obstante, desde Casa Rosada ya le menguaron su Gabinete: le sacaron a Hernán Lacunza, su ministro de Economía, un hombre que hubiese sido clave en esta coyuntura donde se apunta a mejorar el bolsillo.
Con menos prisa, el candidato del Frente de Todos a la Gobernación, Axel Kicillof, retomará recién el jueves sus actividades proselitistas. Si bien todavía su agenda está en diagramación, INFOCIELO pudo reconstruir que arrancará por Chacabuco.
Según se adelantó desde su entorno, el exministro de Economía seguirá con la misma dinámica de las recorridas por distritos del interior y del Conurbano, en las cuales seguirán teniendo mucho protagonismo los intendentes y Sergio Massa.
Kicillof se tomará su tiempo para adelantar planes concretos de gobierno y quiénes podrían ser ministros en áreas clave, a pesar de que ya nombres que suenan.
También está anunciada una cumbre de Kicillof con Alberto Fernández y con todos los intendentes y candidatos locales del peronismo. La está organizando el PJ de Fernando Gray pero aún no tiene fecha ni lugar.
Por el lado de Vidal, en su equipo trabajan contrarreloj para diseñar una batería de decisiones que la pongan otra vez en carrera. Están en carpeta: créditos para las pymes, una baja de impuestos o moratorias y un aumento a beneficiarios de planes sociales
Si bien desde Calle 6 no desmintieron que se estén diseñando esas propuestas, informaron a INFOCIELO que todavía no están confirmada ni la letra chica ni el día del lanzamiento. Vidal además prepara reuniones, entre miércoles y jueves, con intendentes y “si tierra” y con los candidatos al Congreso y la Legislatura para contener a la tropa.
Como ya adelantó este portal, en el vidalismo están decididos desandar un camino propio y desmarcarse de la estrategia presidencial. Vidal y su entono apuestan a personalizar más la campaña, a generar más contacto con los vecinos y alejarse de los actos donde solo prevalecieron los funcionarios. Para esto, pretenden que Vidal no esté tan pegada a Macri, como lo estuvo en la previa de las PASO.
Las matemáticas juegan en contra del macrismo: Vidal quedó debajo de Kicillof por más de un millón y medio de votos y Juntos por el Cambio podría perder el dominio de todas las ciudades que ganó en 2019, la mayoría en manos de jefes comunales del PRO. EA
fuente:www.infocielo.com
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